La Ley de Segunda Oportunidad o mecanismo de la segunda oportunidad es un recurso legal que ofrece a particulares y autónomos la posibilidad de renegociar o incluso eliminar de forma total o parcial sus deudas cuando no es posible hacer frente a su pago. Gracias a la Ley de Segunda Oportunidad se puede sobrepasar una mala situación económica provocada por un endeudamiento excesivo.
¿Cómo funciona la ley de la segunda oportunidad?
Gracias a la Ley de la Segunda Oportunidad, las personas sobre endeudadas tendrán la posibilidad de llegar a un acuerdo de pago acorde a sus posibilidades. Si este falla, se podrá pedir el BEPI (Beneficio de la Exoneración del Pasivo Insatisfecho) o, lo que es lo mismo, la cancelación total de las deudas.
Para poder solicitar la aplicación de la Ley, se deberán cumplir una serie de requisitos. Además, será muy importante contar con un buen historial crediticio.
Pero…¿Esta Ley a quién va dirigida?
Esta medida va dirigida a los autónomos y particulares que se encuentran en una situación de bloqueo económico o sobreendeudamiento, debido a las deudas que no han podido saldar. Hasta ahora, únicamente las empresas podían declararse en situación de bancarrota.
Entonces…¿Cómo puedo saber si puedo acogerme a esta Ley de segunda oportunidad y qué necesito demostrar para que me pueda acoger a ella?
No siempre es posible acogerse a sus beneficios. Existen unos requisitos para acogerse a la Ley de Segunda Oportunidad, que son los que te exponemos a continuación:
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Probar que no se cuenta con patrimonio suficiente para hacer frente a las deudas contraídas.
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Que las deudas no superen los cinco millones de euros.
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Acreditar que las deudas se han contraído actuando de buena fe.
¿Puedo cancelar todas las deudas a través de la Ley de segunda oportunidad?
Al principio, uno de los puntos débiles de la Ley de Segunda Oportunidad fue que no todas las deudas podían ser exoneradas, quedando fuera de la misma las contraídas con las Administraciones Públicas (generalmente se trata de deudas con Hacienda y/o con la Seguridad Social).
Por suerte, en julio del 2019 una Sentencia del Supremo determinó que dichas deudas deberían también ser objeto de la exoneración del pasivo insatisfecho. Por lo tanto, en la actualidad sí que es posible eliminar las deudas con Hacienda y la Seguridad Social gracias a esta Ley.
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